Los forenses descartan que Miguel Carcaño sufra ningún tipo de trastorno psiquiátrico

Miguel Carcaño está cuerdo. Tanto como cualquier ciudadano de a pie que no haya cometido el crimen que se le imputa a este joven de 20 años. Ésa es la conclusión a la que han llegado los expertos forenses del Instituto de Medicina Legal (IML) de Sevilla -dependiente de la Consejería de Justicia y Administración Pública de la Junta- que examinaron el pasado mes de julio al asesino confeso de Marta del Castillo en busca de una enfermedad psiquiátrica que pudiese explicar, o al menos servir de excusa, el salvaje crimen que, según su propio relato, cometió junto al menor apodado el Cuco el 24 de enero pasado.
Fue el juez que investiga la desaparición y presumible muerte de Marta, el magistrado Francisco de Asís Molina, el que ordenó a finales de junio que Miguel fuese sometido a un exhaustivo examen psiquiátrico por parte de los forenses que trabajan en los juzgados con el objetivo de comprobar cuál es su estado mental, si sufre algún tipo de patología y si ésta, en su caso, pudo influir en los hechos cometidos en la noche del 24 de enero, cuando golpeó, amenazó, violó y asesinó a la que había sido su ex novia en su piso de la calle León XIII, en el barrio de la Macarena, que compartía con su hermano, el también imputado Francisco Javier Delgado.
El informe con las conclusiones de los expertos, al que ha tenido acceso elmundo.es, está ya en el Juzgado de Instrucción 4, aunque el magistrado no lo leerá hasta finales de mes, una vez que regrese de las vacaciones que comenzó a mediados de julio.
Los forenses del IML sevillano son contundentes a la hora de asegurar que Miguel Carcaño no sufre "patología alguna". O sea, que no padece ninguna enfermedad que hubiese podido afectar a su capacidad intelectiva y volitiva (a su inteligencia y a su voluntad) a la hora de tomar decisiones y llevar a cabo los actos que éstas implican, incluido cometer un asesinato.
El examen psiquiátrico de Miguel Carcaño fue solicitado por la defensa del asesino confeso de Marta y constituía -hasta que se han conocido sus resultados- una de las escasas opciones que tenía el principal imputado para atenuar la que se antoja una importante condena. Sobre todo si mantiene, como ha hecho hasta ahora y después de su última confesión, que no sólo mató a su ex novia, sino que, además y en compañía de su amigo menor, la golpeó y la violó para, a continuación, arrojar su cadáver a un contenedor de basura.
El informe forense hace inviable alegar una circunstancia atenuante para lograr una reducción sustanciosa de la pena.
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Ahora que no vengan otros forenses a rebatir esto, lo que está mal de esta bestia es la falta de sentimientos, Marta sigue sina parecer y no me creo lo del contenmedor, creo que fue al río, si no hay otra ocultación del cadáver que no hayan expresado, la ley debe actuar y ser inflexible, ellos lo fueron con la vida de Marta