Marilyn Monroe realizó sus últimos guiños y mohines ante Bert Stern en 1962, apenas seis semanas antes de morir.
Aquellas tres sesiones dieron para mucho, para sacar adelante las fotografías de moda encargadas por la revista Vogue y también para mostrar a la actriz en su faceta más natural.
Un total de 80 fotografías de aquellas realizadas por el afamado fotógrafo durante el mes de julio, en el hotel Bel Air de Los Ángeles, se pueden ver hasta el próximo 12 de marzo en las instalaciones del hotel Valbusenda, situado en las proximidades de Toro (Zamora).
El director del establecimiento, Raúl Huerga, destaca que se trata de una colección privada original en la que la actriz ofrece una imagen "cercana, accesible, absolutamente humana en la que no tiene reparos, siquiera, en mostrar sus cicatrices", las derivadas de una operación de vesícula realizada semanas antes. Se trata de fotografías, añade, en las que la diva, en sus momentos más bajos, aparece incluso sin maquillaje.
A pesar del planteamiento natural de la sesión de fotografías a la que se sometió Marilyn Monroe las imágenes que se pueden ver en Valbusenda son atractivas, sensuales, muy sofisticadas, pícaras e inocentes. Marilyn aparece jugando con joyas, con flores, con telas, mostrando su cuerpo y sacando partido a su mirada.
La exposición, que se puede ver bajo el título de The Last Sitting, se muestra por primera vez en España. Llega después de lograr en Viena más de medio millón de visitantes.
El acceso a la muestra cuesta nueve euros y se puede ver en horario ininterrumpido de 9 a 21 horas.
La gerencia del hotel ha arropado la exposición con todo un cúmulo de detalles, desde la bienvenida que reciben los visitantes con una copa de champán Dom Pérignon, el favorito de la actriz, hasta la creación de menús especiales en los que se recrea la que fue la última cena de Marilyn, que consumió entre otras preparaciones, champiñones rellenos. Además, uno de los obsequios del hotel para las clientas está formado, no podía ser de otra manera, por un pequeño frasco de Chanel nº5.
Los responsables del hotel se muestran satisfechos con la aceptación que ha tenido la exposición incluso antes de inaugurarse, al haber logrado una importante reserva de entradas
Aquellas tres sesiones dieron para mucho, para sacar adelante las fotografías de moda encargadas por la revista Vogue y también para mostrar a la actriz en su faceta más natural.
Un total de 80 fotografías de aquellas realizadas por el afamado fotógrafo durante el mes de julio, en el hotel Bel Air de Los Ángeles, se pueden ver hasta el próximo 12 de marzo en las instalaciones del hotel Valbusenda, situado en las proximidades de Toro (Zamora).
El director del establecimiento, Raúl Huerga, destaca que se trata de una colección privada original en la que la actriz ofrece una imagen "cercana, accesible, absolutamente humana en la que no tiene reparos, siquiera, en mostrar sus cicatrices", las derivadas de una operación de vesícula realizada semanas antes. Se trata de fotografías, añade, en las que la diva, en sus momentos más bajos, aparece incluso sin maquillaje.
A pesar del planteamiento natural de la sesión de fotografías a la que se sometió Marilyn Monroe las imágenes que se pueden ver en Valbusenda son atractivas, sensuales, muy sofisticadas, pícaras e inocentes. Marilyn aparece jugando con joyas, con flores, con telas, mostrando su cuerpo y sacando partido a su mirada.
La exposición, que se puede ver bajo el título de The Last Sitting, se muestra por primera vez en España. Llega después de lograr en Viena más de medio millón de visitantes.
El acceso a la muestra cuesta nueve euros y se puede ver en horario ininterrumpido de 9 a 21 horas.
La gerencia del hotel ha arropado la exposición con todo un cúmulo de detalles, desde la bienvenida que reciben los visitantes con una copa de champán Dom Pérignon, el favorito de la actriz, hasta la creación de menús especiales en los que se recrea la que fue la última cena de Marilyn, que consumió entre otras preparaciones, champiñones rellenos. Además, uno de los obsequios del hotel para las clientas está formado, no podía ser de otra manera, por un pequeño frasco de Chanel nº5.
Los responsables del hotel se muestran satisfechos con la aceptación que ha tenido la exposición incluso antes de inaugurarse, al haber logrado una importante reserva de entradas
elmundo
No morirá nunca Marilyn porque era alguien especial, no me extraña que sea un éxito la exposición ya sabéis un hotel cerca de Toro en Zamora hasta el 12 de Marzo y de 9 a 9, merece la pena
8 comentarios:
murio tan joven...
Sí, una pena que podríamos haberla viisto más, besos Paula
Debe ser muy buena la exposion..Marylin siempre fue un mito..
Só Thomaz tiene que merecer la pena, saludos
me encanta su última sesion de fotos, he visto muchas fotos de esa sesión pero no las 80 y por eso seria interesante ver la exposición, ojala la hiciesen también aqui en asturias
Las tenemos a dos horas y media o tres, no estaróa mal que las tuviéramos aquí, saludos Boris
Murió joven, pero nunca se olvidará. un abrazo
Marilyn es algo que pertenece a todos ya
Un fuerte abrazo pro_mágica
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