martes, 13 de septiembre de 2011

El nacimiento de nuevas estrellas depende del gas de las galaxias y no tanto de los choques entre las mismas



Las galaxias no necesitan chocar entre sí para desencadenar el proceso de formación de estrellas, con lo que se derriba la hipótesis sobre este tema dominante hasta ahora en el campo de la astronomía. Esto es lo que acaba de demostrar la nave Herschel de la Agencia Espacial Europea (ESA).

Este telescopio espacial, en órbita desde 2009, ha permitido descubrir un proceso de evolución que los cientificos del proyecto consideran "mucho más majestuoso". El hallazgo ha sido posible gracias a las observaciones realizadas en dos regiones del firmamento, cada una de un tamaño aparente equivalente a un tercio de la Luna llena. Según explica la ESA en un comunicado, es el gas y no el choque de galaxias el que establece el nacimiento de una estrella.

"Herschel ha estudiado más de mil galaxias, cada vez más distantes, recorriendo un 80% de la historia del cosmos", indica la ESA en su comunicado, que dice que ha sido como "observar la historia del Universo a través del agujero de una cerradura".

Se sabía ya que la tasa de formación de estrellas experimentó un gran pico en las primeras fases del Universo, hace unos 10 mil millones de años, cuando algunas galaxias originaban estrellas a un ritmo de diez a cien veces mayor al que se puede observar hoy en día.

En el Universo actual, según la ESA, esas tasas son poco habituales, y siempre parecían estar relacionadas con una colisión entre galaxias, por lo que los científicos supusieron que siempre había sido así.

Ritmo vertiginoso

La ESA explica que al estudiar galaxias muy lejanas, cuya luz comenzó a surcar el firmamento hace miles de millones de años, el telescopio Herschel ha podido demostrar que esa hipótesis era errónea.

El análisis de los datos generados ha permitido concluir que "las colisiones entre galaxias solo jugaron un pequeño papel en la evolución del Universo primitivo, a pesar de que algunas de las galaxias más jóvenes estaban formando estrellas a un ritmo vertiginoso".

Al comparar la cantidad de radiación infrarroja emitida por estas galaxias en distintas longitudes de onda, el equipo de investigadores pudo demostrar que la tasa solo depende de la cantidad de gas almacenado en la galaxia, independientemente de las colisiones que ésta sufra.

"El gas es la materia prima para la formación de nuevas estrellas. (...) Cuanto más gas contenga una galaxia, más estrellas formará", apunta el comunicado.

Uno de los investigadores participantes, David Elbaz, aclara que "las colisiones solo juegan un papel decisivo en aquellas galaxias que todavía no albergan una gran cantidad de gas, aportando el material necesario para desencadenar altas tasas de formación de estrellas".

Según la ESA, eso es lo que se puede ver en las galaxias actuales, que tras haber estado creando estrellas durante más de 10 mil millones de años, han agotado la mayor parte de sus reservas gaseosas.

"Estos nuevos resultados cambian por completo nuestra percepción de la historia del Universo", se felicitan en la Agencia Espacial Europea, según la cual esta explicación "mucho más majestuosa" establece que "la mayor parte de las galaxias va creciendo de forma lenta y natural a partir del gas que atraen de sus alrededores".

elmundo

La teoría de las colisiones de galaxias como desencadenantes del nacimiento de nuevas estrella se queda atrás por las observaciones de este extraordinario ojo que es Herschel, depende del gas de la galaxia

4 comentarios:

Verónica O.M. dijo...

¡Muy interesante esos estudios! todo lo que sea saber más lo es.
Besos, muy feliz noche

silvo dijo...

Van a tener que revisar yeorías, lo cierto es que podemos ver más que antes y eso e lo que nos ayuda a avanzar, besos Verónica!

LIV dijo...

me interessa los studios del nascimento das estrellas,universo...verdadera poesia.

silvo dijo...

Poesía y fuerza natural,es artyístico sin duda, gracias por tu visita y comentario LIV