jueves, 17 de junio de 2010

La reina de los cosméticos, espiada



La encarnizada disputa familiar en el imperio francés de la cosmética L'Oreal alcanzó un nuevo punto culminante, ya que durante meses uno de los mayordomos de la millonaria grabó las conversaciones privadas de la principal accionista, Liliane Bettencourt, la mujer más rica de Europa.

Según RTL, el mayordomo y un informático han sido detenidos por las grabaciones.

Estas grabaciones fueron entregadas a la única hija de Bettencourt, que quiere emplearlas como prueba de la incapacidad mental de su madre, de 87 años. Entre mayo de 2009 y 2010, el empleado registró las conversaciones de la millonaria con una pequeña grabadora oculta en una cajita negra.

"No podía soportar más lo que veía", declaró a 'Le Point' el empleado. Tras 20 años al servicio de la familia, el mayordomo dimitió, harto de "ver cómo gente sin escrúpulos abusaba de Madame".

Antes, el misterioso empleado dejó registradas las conversaciones que mostraban el declive de su señora. La revista de noticias difundió este jueves algunos extractos de la transcripción, que transmiten la impresión de que la heredera de L'Oreal se encuentra, cuando menos, muy olvidadiza.

En una de ellas, por ejemplo, se ve cómo la anciana millonaria descubre con sorpresa que la isla de Arros, en las Seychelles, ya no le pertenece. Al parecer, la anciana desconocía los

La disputa
Desde hace tiempo que Bettencourt y su hija libran una cruda batalla. Françoise Bettencourt-Meyers acusa a su madre de no estar en plena posesión de sus facultades mentales y de derrochar el dinero.

Por ejemplo, su amigo y fotógrafo François-Marie Banier recibió regalos por un valor de 993 millones de euros (unos 1.230 millones de dólares).

Bettencourt-Meyers acusó al fotógrafo de aprovechar la supuesta senilidad de su madre. Pero la propia Bettencourt afirmó que se encuentra en pleno uso de sus facultades y que hizo los regalos voluntariamente.

Recientemente, Françoise intentó sin éxito que su madre fuera puesta bajo tutela. La anciana multimillonaria reside en una mansión señorial en el distinguido suburbio parisino de Neuilly-sur-Seine.

Según los últimos datos de la revista estadounidense 'Forbes', la fortuna de Bettencourt ascendía a 20.000 millones de dólares (unos 16.200 millones de euros).


elmundo

No se está para incapacitar o no pero sí se que es una pena que acaben así a pesar, en parte a causa, del dinero que acumulan, probablemente sin dinero no tendría esa mansión pero tampoco esta pelea, hemos visto, lo vemops en cantidades mucho más pequeñas que los herederos pelean su herencia, sobre todo cuando piensan que falta poco para recibirla.

2 comentarios:

ELILUC dijo...

Es triste esta historia...como tantas otras...mucha soledad...
un beso

silvo dijo...

Sí, el dinero genera muchos p`roblemas de este tipo, es triste, bsss Mery