viernes, 22 de noviembre de 2013

Vinicio Riva: "El Papa no sabía si era contagioso y me besó"


El hombre con neurofibromatosis al que abrazóel papa Francisco, el italiano Vinicio Riva, ha asegurado que en ese momento sintió como si su corazón saliera de su cuerpo y ha destacado que el Pontífice le acarició toda la cara y le besó sin pensarlo, sin saber que si era o no contagioso.
 "Mi enfermedad no es contagiosa pero él no lo sabía y simplemente lo hizo, me acarició por toda la cara y mientras tanto yo sentí solo amor", ha explicado en una entrevista concedida al diario británico Daily Mail. Vinicio Riva es de Vicenza, al norte de Italia, tiene 53 años y sufre la enfermedad genética neurofibromatosis que ha provocado la aparición de tumores no contagiosos por todo su cuerpo. A principios de este mes el papa Francisco lo abrazó y besó en una audiencia en la Plaza de San Pedro. "Era el paraíso. No pensó si abrazarme o no", indica Riva, al tiempo que añade que la caricia de Francisco hizo que su corazón latiera "tan fuerte que pensaba que moriría".
 Y aunque ha precisado que el Papa estuvo completamente en silencio, considera que "a veces se puede decir mucho sin decir nada". Según recuerda, el Papa se acercó y él le besó la mano, pero mientras, el Pontífice, con la otra mano, le acarició su cabeza.
Después, le atrajo hacia sí en un fuerte abrazo, besando su cara. "Mi cabeza estaba contra su pecho y sus brazos me envolvían. Sólo duró un minuto pero a mí me pareció una eternidad", comenta. Riva acudió al Vaticano acompañado por su tía, Caterina Lotto, de 68 años. Ella les ayuda tanto a él como a su hermana, que también padece la enfermedad pero en menor grado. 
 Asimismo, les da parte de su pensión pues, si no, apenas podrían salir adelante con los 250 euros que reciben al mes por su discapacidad y los 150 euros de sus trabajos voluntarios. Riva ha pasado por numerosas operaciones de corazón, garganta y vista y a menudo sufre problemas respiratorios por su enfermedad que le fue transmitida genéticamente por su madre. De hecho, afirma que los médicos le daban una esperanza de vida de 30 años. 
 Además, cuenta que le cuesta caminar por lo que acude al trabajo en bicicleta con la que también le gusta pasear por la ciudad. Sin embargo, para visitar el Vaticano lo hizo en silla de ruedas debido al largo tiempo de espera. 
 En la entrevista, Riva recuerda un día doloroso en el que le obligaron a abandonar su asiento en un autobús. "Un hombre dijo que no me podía sentar allí, dijo que no quería mirarme. Ninguno de los pasajeros me defendió. Me sentí terriblemente mal", afirma. Una sensación totalmente contraria a la que vivió el pasado 6 de noviembre cuando el Papa Francisco demostró una vez más su amor por los más débiles, por los enfermos y necesitados.

lavanguardia

Este Papa es especial y lo ha demostrado desde el primer segundo, este hombre ha sido reconfortado y tratado como tal, además con cariño, Francisco es una bendición para los tiempos que corren


6 comentarios:

Anónimo dijo...

Si, Papa Francisco es una gran bendición para nosotros cristianos.

Saludos!

silvo dijo...

Una gran bendición para sentir orgullo, saludos Valentim!

Verónica O.M. dijo...

Se le ve muy cercano.
Besos

silvo dijo...

Muy natural, como a mí me gusta la gente, muy cercano, sí, besos y buena noche Verónica!

Boris dijo...

¿Habra alguien que todavía no sea fan de este hombre? La actitud que siempre muestra Francisco es la que deben seguir todos los futuros Papas para volver a hacer que la gente crea en algo

silvo dijo...

Cierto hará mucho bien esta persona al mundo, bueno ya lo está haciendo, saludos Boris