La Agencia de Seguridad Nuclear de Japón ha decidido elevar la gravedad del accidente nuclear de Fukushima de 5 al máximo de 7, con lo que lo equipara con el ocurrido en Chernobil en 1986.
La agencia indicó que los reactores dañados desde el tsunami del 11 de marzo en la central nuclear de Fukushima Daiichi han estado liberando cantidades masivas de sustancias radiactivas al aire, que suponen un riesgo para la salud humana y el medio ambiente de la zona.
No obstante, el nivel de emisiones radiactivas registrada desde el inicio del accidente nuclear en Fukushima es equivalente al 10% de los medidos después de la catástrofe de Chernobil, que se produjo cuando el reactor operaba a máxima capacidad, mientras en Japón las operaciones se habían detenido por el terremoto.
El portavoz de la Agencia de Seguridad Nuclear, Hidehiko Nishiyama, ha explicado que, a diferencia de Chernobil, en Fukushima el nivel de radiación, pese a ser alto, permite que los operarios trabajen en las instalaciones para estabilizar las cuatro unidades más dañadas.
Sin embargo, la empresa propietaria de la central, Tepco, afirmaba poco después que la cantidad de radiación liberada podría exceder la emitida tras el accidente de Chernobil.
Si Fukushima sigue emitiendo material radiactivo, es posible que la cantidad supere a la del incidente nuclear ocurrido en 1986 en Ucrania, indicó Junichi Matsumoto, de Tepco.
Dos accidentes diferentes
Nishiyama ha insistido en que los dos accidentes -los únicos que han recibido la calificación 7 de INES- son diferentes, ya que en Chernobil explotó el núcleo del reactor, mientras en Fukushima las detonaciones de hidrógeno afectaron al edificio externo de las unidades.
El aumento de la gravedad del accidente en la escala internacional está basado en los cálculos provisionales de la agencia nuclear japonesa, que ha detectado altas concentraciones de cesio y yodo radiactivo en la zona.
Según Nishiyama, las emisiones de yodo 131 desde el inicio de la crisis superan los 10.000 terabecquerel, por debajo de los cientos de miles de terabecquerel que se emitieron en Chernobil (Ucrania).
El 18 de marzo, una semana después de el devastador tsunami, Japón elevó la gravedad en Fukushima de 4 al nivel de 5, que lo situaba al nivel del accidente de la central nuclear estadounidense de Three Miles Island en 1979.
Este lunes, el Gobierno decidió, además, que ampliará las zonas de evacuación a otras zonas fuera del perímetro de veinte kilómetros desde la central, entre ellas el pueblo de Iitate a 40 kilómetros de distancia.
Incendio en el reactor 4
Poco antes de confirmarse la noticia, un nuevo incendio ya extinguido ha hecho saltar todas las alarmas en la central. En esta ocasión ha sido el reactor número 4 el que ha experimentado las llamas, según ha informado la agencia Kyodo. En la zona no se ha producido un cambio en los niveles de radiación, de acuerdo con la misma fuente.
El fuego fue detectado por un trabajador a las 6.38 de la mañana (21.38 GMT del lunes) en un edificio cerca de la salida de agua al mar del reactor. Según Tepco, la compañía operadora de la central, el operario detectó el humo en el lugar en el que se analizan muestras de agua al sur de la central e inmediatamente avisó a los bomberos que trabajan en las instalaciones, los cuales sofocaron el incendio.
La eléctrica aún investiga las causas del fuego, que pudo iniciarse en una zona de baterías y generadores.
Además, esta madrugada se producían dos nuevas réplicas. Una de magnitud 6,6 que sacudía la provincia central de Chiba y que se ha dejado sentir con claridad en la capital nipona. Y otra horas después de magnitud 6,3 y que obligaba a evacuar temporalmente la central.
En Tokio, el seísmo ha vuelto a sacudir los edificios, como ha ocurrido con frecuencia desde que el 11 de marzo se produjo el gran terremoto, que ya ha provocado 13.100 muertos y 13.700 desaparecidos.
Las líneas del metro de la capital y el servicio de tren bala o Shinkansen fueron paralizados temporalmente como medida de precaución, según la cadena de televisión NHK, al igual que las pistas del aeropuerto internacional de Narita.
elmundo
Ya se reconoce al admitir el 7 en la valoración que se ha emitido mucha radioactividad, ahora que la pelea continúa a ver si pueden controlar algo el tema a pesar de los seismos que no cesan, también espero que hayan aprendido que las centrales en ciertas ubicaciones son un grave peligro
2 comentarios:
Bom dia!
O homem enquanto não destruir o planeta não sossega. Somos seres em involução em alguns aspectos, principalmente na questão do amor pela vida e ao próximo.
Beijos!
Carla
Eso parece Carla Fernanda creo que es lo segundo que dices, el cambio de valores lo que le lleva ahí, la ciencia continúa su avance la aplicación de la misma es lo que nos lleva por mal camino, beijinhos!!
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