No a la extrema delgadez y sí a los cuerpos reales. Ese es el grito que ha puesto en el cielo 'Brigitte'. No es una chica cualquiera, sino la revista para mujeres más vendidas de Alemania con más de 70.000 copias que ha decidido dejar de usar el Photoshop para 'engordar' a las modelos que aparecen en sus páginas, sustituyéndolas en su lugar por mujeres de la "vida real".
Tal y como informa el diario británico 'The Guardian', esta medida es la última iniciativa llevada a cabo para terminar de una vez por todas con la conocida "talla cero", muy presente en las pasarelas y en las publicaciones actuales, y a su vez con las críticas de las lectoras de la revista que aseguran no sentir ninguna conexión con las mujeres representadas en los contenidos de moda y que "no querían seguir viendo huesos protuberantes".
De este modo, "desde 2010 no trabajaremos con modelos profesionales nunca más", ha asegurado Andreas Lebert, editor en jefe de la revista, quien a su vez no duda en asegurar que está harto de tener que 'retocar' las fotos de modelos extremadamente delgadas, que nada se corresponden con la realidad de la mujer de la calle.
Una práctica la del Photoshop muy recurrente que han usado no sólo las revistas para sus modelos anónimas. También algunas personajes reconocidos como el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, al que la revista 'Washingtonian' le cambió el fondo y el color del pantalón en una foto en la que aparecía sin camiseta; Nicolás Sarkozy y la pequeña eliminación de michelines que le realizó la revista 'Paris Match'; su ministra de Justicia, Rachida Dati, quien vio como su anillo valorado en 15.000 euros desaparecía en la edición de 'Le Fígaro'; o Keira Knightley, cuyos pechos fueron aumentados en el cartel promocional de la película 'El rey Arturo'.
"Durante años hemos tenido que usar el Photoshop para engordar a las chicas, especialmente sus muslos y su escote. Algo inquietante y perverso que además, ¿qué tiene que ver esto con nuestra lectora real?", se pregunta Lebert, mientras llega a la verdadera raíz del problema: "Las modelos de hoy pesan cerca del 23% menos que las mujeres normales. Toda la industria de la moda está anoréxica".
Por ello, para remediar este problema 'Brigitte' pedirá tanto a sus lectoras como al resto de mujeres del país que se ofrezcan como verdaderas modelos en la realización de artículos sobre moda y maquillaje. "Estamos buscando mujeres que tengan su propia identidad, ya sean estudiantes de 18 años, la presidenta de una empresa, artistas, futbolistas", asegura Lebert, el cual intenta conseguir una mezcla entre mujeres prominentes (políticas, actrices,...) y completas desconocidas.
Críticas, objetivos e inspiración
Lo que podía ser para muchos un aplauso a la sensatez y a los estereotipos que atentan con la salud de las modelos, para los críticos de la publicación no se trata más que de una estrategia camuflada para reducir costes por la bajada de ventas de 'Brigitte' y para intentar captar a nuevas lectoras. Unas sospechas que Lebert ser ha encargado de eliminar, después de afirmar que a "las mujeres corrientes" se les pagaría lo mismo que la revista pagaría a la agencia de modelos.
Precisamente, estas empresas han reaccionado con bastante escepticismo al 'plan Birgitte'. De hecho, Louisa von Minckwitz, propietaria de la Louisa Models en Munich y en hamburg, donde las modelos tienen que estar en una talla 36, tendiendo hacia una 34, entendía la rabia contra las modelos extremadamente delgadas, pero dudaba también que las lectoras quisieran comprar una revista para contemplar mujeres corrientes: "La verdad es que las mujeres quieren ver vestidos sobre gente bella y agradable estéticamente".
Aunque todavía no hay muchas candidatas para 'comprobar' esta nueva iniciativa, Lebert ya ha puesto sus ojos en tres posibles candidatas que cubrirían perfectamente con las expectativas. La primera de ellas, la canciller Ángela Merkel, a la que recientemente se le ha modelado una Barbie inspirada en ella. La segunda, una de las grandes deportistas del país y mejor jugadora de tenis de todos los tiempos, Steffi Graff. Por último, la ministra y madre de siete hijos, Úrsula von der Leyen.
Esta idea que ha tenido Lebert para 'Brigitte' puede venir inspirada por la llamada de la editora de la 'Vogue' británica, Alexandra Schulman, a las principales casas de moda para acabar con la cultura de la 'talla cero', que ha provocado la muerte de varias modelos, entre ellas en el año 2006, a causa de las extremas dietas a las que se han visto sometidas muchas de ellas. Es el caso de las hermanas uruguayas Luisel y Eliana Ramos.
En España, hace dos años para evitar esta tendencia, decidió no dar cabida en su Semana de la moda de Madrid dentro de la famosa pasarela Cibeles, a aquellas modelos cuyo índice corporal fuera menor al 18,5%. Lo mismo ocurrió en los 'shows' de moda de Milán, donde las modelos muy delgadas tampoco pudieron desfilar en las pasarelas.
elmundo
Muy buena idea que debería ser seguida en todas partes, no son las modelos que nos presentan el ejemplo a seguir, no deben creerse las chicas que están gordas por ver a esa "famélicas", la belleza está en todas y cada una de las tallas, es bello lo natural, no hay un patrón definido, ya que puede ser bello lo delgado o lo menos delgado, gusta lo simpático, agradable, buena persona etc..., hay muertes como dice el artículo aquí de dos modelos uruguayas, de Karen la cantante de los hermanos Carpenters y mira que era guapa, esa voz, no tenía ninguna necesidad de estar delgada, se obsesionan y enferman, no es, lo delgado lo más bello, y la belleza solamente existe si es para alguien
4 comentarios:
plas, plas, plas, plas (aplausos)
ya era hora que alguein se diera cuenta no?
un besazooo
Si Amparo, ahora debe cundir el ejemplo, que han dado un patrón de belleza falso y ha hecho mucho daño,
Um beso y buena noche
Muy bien me parece genial esto. Un abrazo
A ver si cunde el ejemplo
Un fuerte abarzo y gracias pro_mágica
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