Ni a propósito le hubiera salido más redonda la jugada. Una pareja de jiennenses se casa en 2008 con la conquista de la selección del título de la Eurocopa y su primera hija, Victoria, nace con el triunfo de España en el Mundial: ¿Casualidad o destino?
Los jiennenses Óscar Alvariño Prieto y Carolina Carrasco Alcalá contrajeron matrimonio el 28 de junio de 2008. Al día siguiente, la selección española se proclamaba campeona de la Eurocopa con un gol de Fernando Torres. El día de la final del Mundial, el 11 de julio, la mujer se puso de parto. Su hija nació de madrugada, justo cuando España se echaba a la calle para celebrar la victoria, que era también su “Victoria”.
A veces, la realidad supera a la ficción, como se suele decir, y resulta imposible que estos cónyuges hubiesen planeado de antemano este cúmulo de circunstancias. La fecha de una boda se decide, normalmente, con un año de antelación y, además, depende de otros factores como la disponibilidad de los invitados o de la propia iglesia o ayuntamiento. De modo, que si Óscar y Carolina se unieron para siempre el 28 de junio fue una auténtica casualidad. Simplemente, les hizo “gracia” que al mismo tiempo que celebraban su “conquista” rumbo de luna de miel a Tailandia, “la Roja” conquistara también el título de la Eurocopa, el segundo desde 1964. Un hito en la vida común de estos jóvenes y un hito en la historia del deporte español. Pero aquí no terminan las coincidencias. Un año y cuatro meses después, Carolina se queda embarazada y cuando se enteran de que será una niña deciden, de mutuo acuerdo, llamarla Victoria.
el día crucial. La fecha prevista del alumbramiento era, “según el médico, el 9 de julio, pero según las cuentas de mi mujer, el 12 de julio”, explica el marido. Tampoco tenían “ni idea” de cómo resultaría el sorteo de los partidos del Mundial ni, por supuesto, que la selección española se enfrentaría a Holanda, el 11 de julio, en una final histórica. “Somos aficionados al fútbol, pero no tanto”, afirma Óscar con ironía. Y justo ese domingo, Carolina rompe aguas y la ingresan en el Hospital Materno Infantil de Jaén. “Estábamos viendo el partido en el televisor de la habitación y fue marcar Iniesta el gol y bajaron a mi esposa al paritorio”, comenta. “Si ya nos lo decían los amigos y familiares, con ese nombre, no tiene más remedio que nacer con la victoria de la selección”, dice, con cierta “guasa”. Así, mientras que España entera se echaba a la calle para festejar el mayor acontecimiento en la historia del deporte patrio, una pareja de jiennenses celebraba, con la misma alegría, su particular “Victoria”.
diariojaen
Hay coincidencias que son especiales,e sta pareja se casa el día de la final de la Eurocopa y tienen una hija el día de la final del mundial, Victoria se llamará y es que es un nombre muy adecuado para alguien con esos antecedentes
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